Si me han leído en ocasiones anteriores saben que soy súper fan de las películas de Disney porque no las considero simples animaciones que están hechas para entretener a los niños, para incluirnos en un mundo mágico, lleno de fantasía, con mucho color mucha diversión y muy familiares. Para mí Disney desde siempre con sus películas “infantiles” ha logrado llevar un mensaje más trascendental razón por la cual soy amante de esta cadena por decirlo de alguna manera. 

 

Luca es una película espectacular tiene un guión bonito, escenarios preciosos que aunque sean animados dan mucho la esencia de lo que es Italia, un lugar majestuoso, quiere personajes que sean agradables que tienen una construcción que llevan a algún lado la historia. 

 

Tuve la oportunidad de hacer parte de un conversatorio con el director de la película y allí él habló sobre lo que representaba esta historia para él al escribirla. Tiene un concepto muy de familia, de la amistad, de ser diferente, de vivir la vida a tu manera.

 

La película se centra en la historia de Luca y su amigo Alberto qué sean dos chicos poco comunes porque ni siquiera son humanos. Son dos criaturas de mar que apenas están empezando a vivir y aunque Luca no conoce más allá de lo que ha visto toda su vida o pues lo que tiene de edad conoce un día a una persona totalmente diferente a él,  que no le teme a nada, que hace las cosas a su gusto, que no le importa ser diferente y raro frente a todo lo que es normal, ya que sólo le interesa hacer lo que ama y explorar el mundo. 

 

Aunque como dije Disney suele hacer de las películas algo agradable para cualquier tipo de público la historia se enfoca en alcanzar un objetivo y es obtener una motocicleta que a Luca y Alberto les parece hermosa y para hacerlo se inscriben en una competencia junto a otra chica que conocen, Giulia, y que también se acopla a lo que son ellos, “un bicho raro”. 

 

El villano de la película es Ercole, otro adolescente que es presumido, no tiene valores y no le importa el respeto por los demás, demostrando lo que encajaría con lo que un niño no debe ser, para enviarles un mensaje directo de lo que está mal y porque no debe ser. 

 

Sin embargo, más allá de ese villano explícito para mí el conflicto de la película se enfoca en la discriminación que vive alguien por ser diferente a lo que se está acostumbrado a ver y así como no se conoce se convierte en un peligro aunque no lo sea. Además, esa discriminación se convierte en el miedo a ser 100% tú.

 

La película como dijo su director es una historia sobre la amistad y la vida, pero por su mensaje de ser diferente y la discriminación, muchas personas la tomaron como si esta historia fuera una representación de la comunidad LGBTI+ y de lo mismo que tienen que vivir al no ser aceptados por la sociedad y tener que esconderse para poder ser.

 

Por supuesto que es un mensaje precioso el hecho de dar entender que todos debemos ser aceptados por qué el ser diferente no hace que seas un riesgo para los demás pero originalmente aunque todo siempre tratemos de ver más allá en las películas de Disney porque realmente de eso se tratan en esta ocasión su mensaje si se enfoca en el respeto y en la diversidad pero aunque me encantaría que así fuera, en esta ocasión no tiene relación directa con la diversidad sexual. 

 

Cabe decir que aunque no la tenga, no quiere decir que el tema del respeto por los demás a pesar de que sean diferentes no sea un mensaje a cualquier comunidad diversa. El cine siempre será una herramienta para llevar un mensaje individual y cada persona lo interpreta a su manera y eso es lo especial. 

 

Sin duda esta película a mi parecer es muy dulce y tiene un mensaje especial por lo que para mí se lleva el micrófono. No le doy puntuación perfecta justamente por lo anterior, siento que tenían la oportunidad de dar un mensaje mucho más grande y podría decirse que se desaprovechó, pero eso no le quita lo trascendental que en sí tiene la película y su intención.